lunes, 28 de noviembre de 2011

Cap. Especial 3° La pequeña aventura de Georg y Daniel

La pequeña aventura de Georg y Daniel

-¡¡no quiero, estas igual que Bill!!-gritaba con todas las fuerzas que tenía mientras me aferraba a la cintura de Amber

-¡venga Georg, ayúdame hombre, no seas mal amigo!-me pedía Daniel mientras me jalaba de la camisa-¡será rápido, lo juro, solo hazme este favor!

-¡¡no, tu me das miedo, Amber ayúdame, ellos me dan miedo con sus gustos!!

-Georg…es tu amigo, deberías de ayudarle-decía con algo de pena

-¡¡¿Qué?!! Pero…es la primera vez que estamos solos después de un tiempo-ella me miro seria

-ósea que lo que paso anoche note importo o que no cuenta eh!-eso me espanto, la solté y la besé, después me separe de ella y me miraba con algo de pena y sonrojada-Georg…-susurraba

-nunca dije eso…lo de anoche fue maravilloso…como cada momento que estoy contigo-ella solo se ruborizo y me abrazaba tiernamente, yo le acaricie la cabeza-te amo

-yo también…

-emmm… ¿si saben que estoy aquí verdad? Y que escucho todo-decía Daniel con algo de seriedad

-perdona…esta bien…te acompaño…perdona Amber-le decía mientras le tomaba la mano

-no te preocupes, a fin de cuentas, como no han tenido trabajo hemos pasado mas tiempo juntos lo cual me alegra, así que…creo que te puedo soltar por unas horas-sin mas me guiñaba un ojo

-en cuanto acabe te voy a buscar a tu casa-le prometía

-es una promesa, bueno ahora me voy-me dio un ultimo beso y se fue

-bueno…creo que nosotros también debemos de irnos…traes tu carro ¿verdad?

-no me vine caminando hasta acá… ¡claro que traigo carro! Tú sabes a que distancia esta tu casa de la mía

-perdona…bueno entonces vamos-salimos de la casa y nos subimos a su carro para después arrancar

-de verdad muchas gracias por venir conmigo…no podía hacer esto solo y de también una disculpa por haber hecho que cancelaras tus planes con tu novia

-no te preocupes, ella dijo que estaba bien y además es verdad…gracias a la boda de Tom tenemos tiempo libre y puedo pasar mucho mas tiempo a solas con ella que en un año de giras o de grabaciones

-me alegra escuchar eso y…me hace sentirme mas culpable

-no importa pero… ¿de plano era tu ultima opción? Que es algo que me molesta ya que estoy al final

-perdona…es que sabía que estabas con tu novia, por eso eras el ultimo, pero si…Diana salió con Tom, Bill no estaba en casa, Gustav estaba terminado de ayudar a un amigo y Leonardo tenía la fiesta de cumpleaños de su hermana…lo hubiera acompañado pero tenía que hacer esto hoy y bueno…yo aun no se hablar alemán muy bien, Diana me podía ayudar ya que últimamente lo habla un poco mas gracias a Tom pero estaba ocupada, por eso necesitaba ayuda, de verdad gracias

-cuando quieras…pero que no se repita lo de mi novia

-esta bien…bueno ya llegamos a nuestra primer parada

-¿el centro comercial?

-si-se giro hacía la parte trasera del carro y me paso una peluca y una chamarra-no quieres que alguien te reconozca verdad

-esta bien…-me comencé a arreglar y bueno…si me veía diferente-ya esta

-ahora si…vamos-comenzamos a caminar por el centro comercial, Daniel sujetaba una pequeña lista-creo que…esto lo podremos comprar aquí

-¿Qué vamos a comprar?

-lo que falta de la boda…solo son unos encargos, pagaremos lo ultimo y recogeremos unos paquetes…además que alguien me obligo a comprarle unas cosas

-¿Quién?

-solo diré…que tenemos que ir al aeropuerto en unas…-miro su reloj-tres horas

-vale…la verdad pobre de ti…pareces secretaria

-¡no soy secretaria!

-si lo eres…-decía divertido de ver las caras de Daniel, yo creo que este fue caricatura en otra vida ya que eso parecían sus gestos, seguí gastándole bromas por un largo rato…cada que salíamos de un local le decía de cosas eh inclusive le daba pequeñas pataditas en su orgullo como a Bill, él solo se reía y seguíamos caminando, note que había muchas chicas en el centro comercial…lo cual me agrada, pero, por el momento solo tengo ojos para Amelia… “¿Qué estará haciendo?...hay!! Daniel me debes una”   


***3 horas después***

-creo que ya tenemos todo-me decía Daniel mientras revisaba por ultima vez la lista donde tenía anotado las cosas,

-¡¿tu crees?!-me quejaba ya que tenía yo la mayor parte de las cosas cargando-sabes…cuando salgo con Amelia no cargo tantas cosas-él seguía concentrado en su lista

-ella no se va ha casar…bueno…ahora si, es todo, solo nos queda ir al aeropuerto-explicaba mientras me quitaba algunas cosas y las cargaba él

-¡luz! Pensé que nunca acabaríamos…además ya me esta poniendo nervioso tanta gente aquí, ¿es normal?-él solo me miro sorprendido-¿pasa algo?

-nada es…es solo que…bueno…casi siempre ustedes están rodeados de gente y no se les ve nerviosos

-eso es diferente, la gente de aquí no se…me ponen nervioso-Daniel miro a su alrededor y era verdad solo hace unos momentos habíamos escuchado unos gritos de euforia…pero se callaron, por el miedo no salimos de la tienda hasta que se calmaron las cosas

-es verdad…hay mucha gente, mejor ya vámonos o me van a retar los amigos de Diana-comenzamos a caminar hacía el estacionamiento

-¿los amigos de Diana?-le preguntaba una vez que llegamos-¿a ellos vamos a recoger?

-si…es una sorpresa, nosotros les tuvimos que enviar los boletos del vuelo y hablarles por teléfono para que supieran todo lo que estaba pasando ya aquí, les daremos la invitación de la boda ya que para ese entonces Tom y Diana no la habían escogido aun

-ya veo…se pondrá feliz…no eh convivido con ella mucho, solo de vez en cuando pero se nota que es una persona muy cariñosa y tierna

-lo es…aun es una niña-decía feliz pero pude ver una tristeza en su mirada que pareciera que nada podía quitársela

-¡¡¡AAHH!!!-escuchamos unos gritos nos giramos y pudimos ver a unas chicas que estaban siendo asaltada en esos momentos, yo saque mi teléfono para hablarle a la seguridad que venía conmigo y que estaba afuera del centro comercial para que viniera a ayudarnos pero…Daniel ya se dirigía a ellos con las manos en los bolsillos del pantalón

-¡esta loco!-grite y me fui corriendo en su dirección

-¡oye!-les grito mientras se ponía a sus espaldas-las están molestando

-¿y a ti quien te llamó? ¡Eh! Niño bonito-lo retaba uno de los tres monigotes que estaban ahí, las chicas solo se abrazaron con miedo, yo me escabullí como pude detrás de ellas para que no me vieran

-las están molestando-repetía Daniel pero… “ese no es Daniel, él…esta raro, es…diferente” y era verdad, estaba serio y en su mirada solo reflejaba frialdad, maldad y decisión parecían…los ojos de algún delincuente, ese hombre tomo a Daniel del cuello de la camisa, pero este solo alzó la pierna y lo tumbó en el piso, una vez en el piso, le soltó un leve golpe en la mejilla y se arregló la camisa junto con la chaqueta que llevaba ese día-me has desarreglado

-¡¡serás crío!!-gritaron los dos y se le aventaron, no dude y me hice hacía delante para ayudar a Daniel pero este en menos de lo que yo me tarde en salir de mi escondite ya los había tirado también al piso, el primero se paro y se acercó a él por la espalda con una navaja, los demás no se movían creo… “creo que los ah dejado inconcientes”

-¡¡Daniel!!-grite la ver que ya lo iba apuñalar pero este con la muñeca le golpeo la mano, con el otro brazo le golpeo en el cuello y con las piernas lo tumbó en el piso, la navaja salió volando y yo la tomé, me puse enfrente de las chicas quienes miraban toda la escena con miedo y lágrimas en la mirada, Daniel le estaba apretando tanto el cuello y los brazos hasta que este calló inconciente, después se paró, se volvió a arreglar la ropa y se giro mientras veía a los tres hombres que estaban inconcientes en el piso mientras se acercaba a nosotras, pero se detuvo en uno y le quito lo que parecía ser un collar, se acercó a una de las chicas y le sonrió tiernamente “ya regreso a ser él”

-es tuyo…verdad-ella solo asintió débilmente, pude ver que su cuello estaba irritado, lo que me decía que se lo habían arrancado-tendrás que mandarlo a arreglar-le dio el collar- se ah roto el seguro con el que se sujeta

-muchas gracias pero… ¿de verdad estas bien?

-si no se preocupen-la otra busco en su bolsa y encontró un pañuelo y un agua, lo mojo y le limpió la mejilla a Daniel, este se quejo un poco

-te has cortado-le decía débilmente, Daniel solo la miro a los ojos

-¿de verdad?-me acerque y le vi-OH! Es verdad…valla hombre, cuando me estabas sorprendiendo…secretaria

-¡¡no soy secretaria!!-me decía rojo de la pena pero…ya había regresado a ser él, las chicas solo rieron un poco pero la del collar me miraba, yo me puse nervioso

-te me haces…conocido

-si todos me confunden con alguien jajaja no se por que-decía lo mas rápido que pude

-tal vez…pero-se giro hacía Daniel-de verdad muchas gracias-después de eso, Daniel solo les puso la mano en la cabeza a cada una y les sonrió

-vallan con cuidado y…díganle a los policías del centro de lo que paso y que vengan por ellos, no tardaran en despertar

-¡si!-las chicas se pararon y se fueron corriendo, en eso Daniel y yo nos fuimos al carro y nos subimos pero no arrancamos, esperamos que llegaran los policías y saber que ellas estaban bien, después de eso nos fuimos, me gire de nuevo hacía los policías pero me pareció ver a los nuestros guardaespaldas con Bill y a una chica a los lejos que lo miraba con lágrimas en la mirada, bastante bonita se giro y me miro después se fue caminando mientras le limpiaba la cara y no solo eso minutos después me pareció ver al Gordo, alcé el cuello para ver mejor pero no vi nada, “que raro”

-no sabía que sabías pelear de esa forma…-le decía pero solo se encogió de hombros-dime… ¿algún día sabre de donde sabes eso?

-tal vez-me decía igual que aquellas chicas…después de eso, solo se formularon preguntas en mi mente pero ninguna respuesta, por mas que le miraba no parecía de esas personas que van ah buscar peleas, es mas…parecía todo lo contrarío

“-¡el tío se volvió loco!-me dijo Tom por teléfono el mismo día que se iba a regresar para Alemania
-hombre, cálmate pero, ¿Por qué paso eso? Dudo que te halla querido agarrar a golpes por que si
-bueno…creo que yo también me pase al decirle unas cosas a él y a su hermana
-vez…además, la verdad no se…por como me contó Bill que es su hermano, no creo que sea como lo pintas
-sabes…solo te diré en mi defensa que él fue el que me tomo de la camisa para querer golpearme
-esta bien…solo trata de no morir antes de la boda
-¡que más quisiera!-nos despedimos y colgamos”

Era verdad…eso me había dicho Tom una vez que casi se peleaban él y Daniel, pero…en ambas ocasiones, “solo lo hizo por defender a alguien pero aun así… ¿de donde aprendió a pelear de esa forma? Por que esa manera…no es de una escuela, es mas…parece de calle” Llegamos al aeropuerto y fuimos a buscar las sala…¡¡¡hay!!! Me sentía tan bien del hecho de no haber sido reconocido y mas en un aeropuerto, estaba tan feliz que ya no me importaba el tema de Daniel y el hecho de que yo estaba preguntando todo para encontrar la sala de llegada, estaba concentrado escribiéndole un mensaje a Amelia pero un grito me sacó de mis pensamientos.

-¡¡¡DANIEL!!!-fue el grito de una mujer, me gire ya que le estaba dando la espalda y pude ver exactamente cuando lo estaba abrazando, detrás de ella venía otro, que se estaba peleando con las maletas, me acerque y le ayude-¡no sabes lo que te extrañe! Y también la sorpresa de cuando nos llamaron, pero ¿verdad que me compraste lo que te pedí de cumpleaños?

-Cristina, ya deja de torturarlo y ayuda a su amigo con tu maleta ¡pobre la esta cargando él!-ella me miro, me sonrió y me abrazo mientras me daba un beso en la mejilla

-¿verdad que me vas ah ayudar con la maleta  o…se la doy a Daniel?-ella me miro con unos ojitos de gato que lo único que pude decir fue…

-no…yo puedo-le conteste feliz, ella me volvió a sonreír

-bueno Daniel a ti te toca lo demás-volteé a ver al que parecía ser el hermano de Cristina, en eso llegó un carrito de maletas de color morado, y otra de color verde-aquí están todas, ah! También te toca pagarle al joven-nos tomo del brazos a su hermano y a ami mientras nos íbamos

-¡¡¡Cristina!!!-escuche el grito de Daniel “ahora veo por que quería que yo le ayudara solo con esta”

-yo me llamó Cristina y él es mi hermano Enrique, mucho gusto-me presentaba ella a su hermano

-yo soy Georg el gusto es mío

-así que tu eres Georg…-me decía Enrique me miro y después dijo-pues si te ves mas grande que en la computadora-en eso su hermana le dio un golpe en la cabeza

-¡serás tonto! Cualquiera se vería más grande en la vida real que en una computadora, no le hagas caso, Georg es un placer conocerte, ¿sabes que? Yo se tocar el bajo haber cuando me das unos tips

-cla…claro-me había dado un poco de miedo Cristina, al parecer era alguien muy abierta y feliz, aunque…creo que también impulsiva “temo por mi cabeza”

-sabes…-ya me decía normal y algo seria aunque seguía sonriendo-no te queda tan mal la peluca

-¿Cómo…

-¿de verdad creías que no sabríamos quien eras y mas con esa peluca mal puesta?-una risa entre burlona e inocente formo en su cara-¿si recuerdas a que venimos a Alemania verdad?

-si…perdona, es solo que…creo que me deje llevar por el hecho de que nadie me reconoció en un largo rato, perdona

-descuida…-llegamos al carro y esperamos a Daniel que no lo veía por ningún lado, Cristina se recargo en el carro al igual que su hermano, me les quede viendo y fue cuando noté que ambos eran gemelos-supongo…que debió de haber sido raro para él ¿no?-me dijo mirando el piso, después me miro-me refiero a “ellos”

-ellos…pues ahora se llevan mejor que antes…algunas veces me hablaba Tom para poder gritar lo que sentía…él decía que no se podía desahogar con su hermano y que mucho menos con sus padres…así que me hablaba y me decía cosas como “hoy me ah vuelto a gritar, ya no aguanto esto quiero morir” o algo por el estilo

-supuse que no estaría feliz con todo esto…-decía con melancolía pero aun seguía manteniendo aquella sonrisa

-tampoco es fácil para Diana-decía enojado su hermano

-es verdad…la primera vez que la vi…no fue precisamente bonito, lloro y se puso un poco mal…le dio fiebre pero…las llamadas cambiaron

-¿las llamadas?-me preguntaron los dos con duda

-después Tom me llamaba para decirme “hoy me sonrió, ya no me dice de cosas, la pude abrazar, la eh cargado como a una princesa, hoy la pude besar por primera vez, hoy me dijo que me quiere…” y la ultima fue la que mas me sorprendió

-¿Qué dijo?-preguntaron de nuevos los dos

-“te amo…le dije hoy y me corresponde”-ambos me miraron sorprendidos, yo solo tenía una tierna sonrisa y volví a ver el piso-Tom…de verdad quiso a Diana desde que la vio…pero él siempre cerró su corazón ante las emociones y el amor…para él solo existían sus padres en especial su madre y Bill…nadie mas pero…al ver a Diana no supo como reaccionar y primero fue odio, después cariño…y termino con el amor que ahora le demuestra a diario-una risa salió de mi boca-a veces siento que me cambiaron a mi amigo por otro pero…sigue siendo el mismo, pervertido y gracioso que conozco solo que ahora se controla con Diana ya al parecer van muy bien ya que hoy están en una cita-Cristina y Enrique solo embozaron una leve sonrisa

-me alegra que ella…pueda salir adelante y se olvide del pasado-decía Cristina quien miro a su hermano-¿no es así Henry?

-si…-dijo débilmente, sin darnos cuenta Daniel estaba enfrente de nosotros todo cansado

-esta…esta…-trago saliva ya que venía todo cansado-esta me la pagas…Cristina

-nada de esta me la pagas, ¿sabes cuanto tiempo llevó esperando aquí? Tengo hambre y no hemos subido las maletas

-vale-me aventó las llaves-abre y ve calentando el carro Georg yo subo las maletas

-lo siento hermano-me fui y abrí el carro ellos se subieron y yo me fui con Daniel a ayudarle-¿puedo hacerte otra pregunta?-le preguntaba mientras acomodaba una maleta

-claro-se quejaba mientras terminaba de pasarme las maletas

-¿te odia Cristina o es amor apache?

-en realidad…-dudo un poco en su repuesta-digamos que si es amor apache, pero no…no nos odiamos, ella es algo parecida a Tom

-¿a Tom, en que?-le preguntaba mientras cerraba la cajuela

-ya lo sabrás

-¿es una de las cosas que luego me dirás verdad?

-si

-esta bien… ¿Qué hora es?

-son las….7 de la noche…valla ya es tarde, ven ¿te dejo en tu casa o en la de Amelia?

-en la mía, me voy a cambiar y luego pasare por ella

-vale… ¡hora de irnos!-nos subimos al carro y pude notar como de vez en cuando Cristina se le quedaba mirando a Daniel pero él ni se inmutaba, llegamos a mi casa y me despedí de todos, prometimos volver a vernos en la cena de compromiso dentro de dos días-¡gracias por acompañarme!-me gritaba antes de irse Daniel

-¡para que están los amigos!-le conteste mientras abría la puerta, este sonó el claxon y desde la ventana me decían adiós Cristina y Enrique, entré a la casa y me fui a bañar lo más rápido que pude y me cambie, me arregle y salí disparado a la casa de Amelia… “Para que están los amigos…si no es para ayudar…gracias Daniel me ayudaste a ser una persona normal hoy y eh podido conocerte mejor”

-bien…ya podemos irnos-me decía Amelia mientras se colocaba su bolsa, yo la abrace y le bese esos labios que tanto me volvían loco

-vamos pues

-si…

 



Hola chicas, de verdad una disculpa por subir hasta ahorita pero es que se me juntaron un buen de cosas que no me dejaban ni acercarme a la compu, además de que estoy preparando mis cosas para poder ¡POR FIN! regresarme a mi casa...todavía no pero ya hecho mucho de menos mi casa....sobre todo mi cama XD jajaja bueno espero que les allá gustado el cap. nos vemos mas adelante, recuerden comentar, amo leer los comentarios...aunque sean poco los aprecio mucho, besos

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Cap. Especial 2° La pequeña aventura de Leonardo y Gustav

La pequeña aventura de Leonardo y Gustav

Estaba caminado por un centro comercial, buscaba un regalo para mi hermana que era su cumpleaños y de paso uno para mi novia, se acercaba nuestro aniversario y realmente quería darle un regalo especial y también a Diana que desde que la conocí me ah caído bien, solo la eh podido ver un par de veces pero se nota que es buena persona, tenía puesto los auriculares mientras escuchaba “dos gotas de mar de jaula de grillos”, entraba en cada tienda que tenía enfrente pero había dos cosas que no me dejaban hacer nada, 1° no me convencía nada y la 2° por alguna razón…el centro comercial estaba a reventar ese día, en especial chicas…me le quede viendo a mas de una para ver que rayos era lo que pasaba “¿acaso habrá una firma de algún tío famoso o que ah pasado?” no le tomé importancia y mejor entré a una tienda de lentes ya que mis lentillas habían tenido un pequeño accidente y necesitaba un remplazo, ya que sin ellas estaba mas ciego que un topo…¬¬’’ y odio las gafas

-buenas tardes ¿en que puedo ayudarlo?-me saludaba una señorita de la tienda

-si, hola, bueno lo que pasa es que eh roto una de las lentillas y quería un remplazo

-claro… ¿vamos a que le hagamos otro examen de la vista? Para poder tener los aumentos correctos

-esta bien-y me comenzó hacer el examen de la vista, odiaba que me pusieran ese aparato en la cara, ¡pesa toneladas! Y siempre me deja marca, pero bueno, después de la tortura pudieron sacar mi aumento, salí del cuarto donde hacían el examen y pude ver a alguien que se me hacía conocido, no le tomé mucha importancia-y… ¿para cuando estarían?

-estarían para este martes en la tarde-me decía feliz la señorita-¿Cómo será su pago?

-crédito-decía mientras sacaba mi tarjeta y se la daba

-Ok…-tomó la tarjeta y comenzó ah hacer el proceso-firme aquí…gracias, aquí tiene su recibo y con lo que recogerá sus lentillas

-gracias, nos vemos en 4 días linda-y sin mas salí de la tienda noté que alguien salió detrás de mi, lo mire por el rabilo del ojo y era el mismo tío que había visto antes, “estoy seguro que le he visto a este, pero ¿Dónde?”-ja!...no me acuerdo-decía para mi mismo en Castellano, solía hablar para mi mismo cuando no quería que alguien supiera lo que pensaba en realidad para luego decir lo contrario en Alemán-bah! Será mejor que lo olvide-iba a caminar cuando choque con alguien-¡¡ah!!-grite al caerme sobre alguien al piso-ah! No…de nuevo la cabeza-me la comencé a sobar mientras me intentaba levantar del pobre al que le toco que le cayera encima-perdona tío no me eh fijado, venga te ayudo-le insistía mientras le tomaba del brazo y le ayudaba a pararse

-gracias-me contesto mientras el también se sobaba la cabeza pero en eso se le calló la gorra que llevaba puesto y la mascada del cuello, me le quede viendo sorprendido y él solo me miraba confundido

-eres….eres…

-¡¡¡GUSTAV TAMBIÉN ESTA AQUÍ!!!-gritaron como locas las chicas que estaban alrededor de nosotros, en eso el gordo me tomo de la muñeca y salimos corriendo de aquel lugar hasta llegar a un escondite perfecto…la sección de deportes del centro comercial

-¡vaya que esas crías si le corren!-me quejaba mientras me tiraba en el piso a respirar

-perdona…pero, ah sido tu culpa-eso me desconcertó me paré y me le puse enfrente al gordo

-¿Cómo que mi culpa? ¡Has sido tu el que ah chocado conmigo!-pero me tapo la boca mientras me volvía a sentar en el piso y en eso pasaron una bola de fans corriendo

-¿serás tonto? O ¿quieres que nos descubran?

-esta bien-decía mientras alzaba las manos en son de paz-pero esta si ah sido mi culpa…la otra…fue de ambos ¿vale?

-esta bien…me llamo Gustav-me extendió la mano y yo se la tome

-Leonardo, placer

-Leonardo…me suena-decía mientras pensaba

-¿tal vez por Daniel o Bill?

-si…de hecho, no me digas que… ¡tu eres el mismo Leonardo que conoció Bill en la casa de Diana y Daniel, el…amigo de Daniel!

-soy el mismo-decía mientras alzaba la mano con la señal de amor y paz

-vaya…no lo creo, me había dicho que tuviste un accidente cuando le viste

-si bueno…-me rasque la nuca-digamos que de verdad me sorprendí al verle, Daniel me dijo que su hermana se iba a casar con Tom pero…bueno trata de entenderme, creí que era otro Tom pero al ver a Bill en la casa dije… “joder aquí vamos” y fue cuando caí en la cuenta de que era el mismo Tom de la misma banda que le gusta a mi hermana

-ya veo…tienes una hermana que es fan de nosotros, ¿Cómo es ella?

-pues…es como yo…cabello ondulado, café claro, ojos azules…se podría decir que es mi…gemela…pero en chiquito

-¿chiquito?

-sip…hoy cumple 9 años, vine al centro a buscar un regalo de cum…-me quede cayado “ya lo tengo”

-Leonardo… ¿Qué pasa?-me le quede viendo maliciosamente a Gustav-emmm… ¿te sientes bien?

-Gustav, mi amigo-decía mientras lo tomaba por los hombros-crees que puedas…ayudarme con una cosita…claro, sería de…amigo a hermano

-claro…pero…me estas asustando ¿Qué pasa?

-podrías ir a la fiesta de cumpleaños de mi hermana…ella es tu fan, mas grande, se la pasa viendo y juntando pósters de ti

-pero…bueno yo…emmm…no losé

-¡¡Gustav de To….-me cayo Gustav poniendo su mano en mi boca, ya que había comenzado a gritar como loco

-esta bien, ¡esta bien! Lo haré, pero no grites-quite su mano de mi boca y sonreí

-gracias…ahora, hay que irnos de aquí-decía mientras me levantaba con cuidado

-¿y por donde pretendes que lo hagamos?-me preguntaba con duda, en eso quite unos maniquíes y le enseñe una puerta

-por aquí

-pero…que…espera ¿Cómo sabías que ahí había una puerta?

-emmm…-algo de tristeza me inundo, pero luego volví a sonreír-digamos que se me este centro como la palma de mi mano… ¿entonces, vienes o que?-le preguntaba mientras abría la puerta, él me siguió hasta que llegamos al estacionamiento-¿traes carro?

-bueno…en realidad le eh pedido a un amigo que me trajera, venía a alcanzar a Bill de hecho pero, no lo encontré así que la respuesta es…

-no…jajaja, vaya que tiene razón mi hermana-lo guíe hasta mi carro un stratrus turbo

-¿Qué dice tu hermana?

-que eres buena persona y además eres como un osito de peluche…ya esta abierto

Seguimos platicando en el camino, realmente me cayó bien… “supongo que de no ser por que Diana se iba a casar con Tom…en estos momentos no tendría un amigo como Daniel o como ella y que estaría bajando por el centro comercial buscando el regalo de mi hermana y”…voltee a ver a Gustav que estaba acomodándose el gorro… “no habría conocido a los héroes de mi hermana, llegamos a mi casa y una vez que estacione y nos bajamos, realmente era pequeña mi casa pero…me gustaba, claro extraña la de España, pero esta era…linda, era solo de un piso con un jardín en la parte de enfrente y uno del doble del tamaño atrás, la casa era perfecta para cuatro personas…lleve a Gustav hasta el jardín trasero que era donde era la fiesta de mi hermana, bueno no era una fiesta grande, ya que solo era la familia y dos amigos de ella, en cuanto cruce la puerta todos me voltearon a ver, pero no preste atención…siempre hacían eso así que estaba acostumbrado, solo metí las manos en los bolsillos y camine en dirección a mi hermana que estaba jugando al té con mis primas y sus amigos.

-Hola princesa-le saludaba, ella me volteó a ver y sonrió ampliamente mientras se me aventaba-¿Cómo estas pequeña?-le preguntaba mientras la cargaba

-bien…ahora que estas aquí-decía ella no había notado a Gustav, lo mire y este la miraba encantado

-te traje un regalo

-¿Dónde?-preguntaba mientras me buscaba, en eso la acerque a Gustav ella lo veía confundida, él se fue quitando las cosas que llevaba encima, se quito el gorro y la gran chamarra que llevaba puesta, ella al verlo sus ojos se iluminaron y sonrió ampliamente-es…

-Lucy, te presentó a Gustav…tu héroe-Gustav se acercó y le tomó la mano que ella le había acercado

-mucho gusto Lucy-le decía feliz, ella se le aventó obligándome a dársela, él la cargo encantado, se veía que estaba feliz de haber venido… “bueno…creo que lo obligue”

-iré a traerte algo de beber

-gracias-me contesto y se sentó en el pasto mientras comenzaba a platicar con Lucy, me fui a la mesa que había puesto mi madre, donde tenía toda la comida para que la gente se sirviera, llegué, tomé el refresco y le serví a Gustav y a mi

-¿Por qué trajiste a alguien sin decirme nada?-me preguntaba mi madre quien se paro enfrente de mí con los brazos cruzados

-hola ma.

-no contestaste-decía divertida mientras me daba un plato con algunos emparedados

-él es Gustav…el baterista que le gusta a Lucy, gracias-los tomé y me disponía a irme

-¿Cuándo volverás a ser el de antes?-preguntaba de manera indiferente

-cuando tu familia no me señale-le conteste serio, sin mas me alejé, pude ver a mi padre mirándome serio…como siempre, solo asentí la cabeza en son de saludo y me fui a sentar con Gustav-¿Qué hacen?-preguntaba ya con mi tono de voz divertido

-tu hermana es realmente tierna

-gracias, Gustav tu eres mi osito de peluche

-jajaja, ya tienes dueña Gustav-decía divertido

-ya veo…me alegra ser tu oso de peluche-le dijo Gustav mientras le acariciaba la mejilla, ella se ruborizo-eres muy tierna…sabes te voy a ser sincero, tengo un regalo para ti

-¡enserio!-gritábamos mi hermana y yo

-si…mira-comenzó a buscar en los bolsillos y sacó una pequeña cajita- es pequeño pero…toma, feliz cumpleaños-ella tomo la cajita emocionada y la fue abriendo, dentro encontró un anillo en forma de moñito, ella se volvió a ruborizar mientras sonreí y volvía a los brazos de Gustav

-¡gracias oshito!

-¿te gusta?

-si mucho…-se le quedo viendo como si este le estuviera contando un cuento sobre hadas, vampiros y magia…justo los cuentos que ella amaba

-ven, te lo pongo-le decía

-¡no!, quiero que Gustav me lo ponga… ¿me lo pones?

-claro...-y le puso el anillo

-ah!...me en sentido, ¡ya no me quieres!-decía dramatizando

-si…quiero ahora mas a Gustav

-auch…tío no te vuelvo a enseñar a mi hermana

-perdón-decía con algo de pena

Seguimos platicando y jugando con mis primos, inclusive Gustav se sorprendió al saber que Lucy estaba aprendiendo a tocar la batería por que él la había inspirado, le dio unos consejos y hasta después de haber partido el pastel él tocó un poco en la batería de Lucy…a ella le quedaba grande y a él le quedaba perfecta, me la estaba pasando tan bien que no me sentí incomodo ni solitario… pero como todo lo bueno en esta vida…tiene su fin.

-perdona Lucy pero Gustav ya se tiene que ir a su casa-le avisaba a mi hermana y era cierto…ya eran las 9 de la noche y la mayoría de mis tíos oh, como les decía yo “esos extraños” ya se habían ido

-awww…-miro con tristeza el pasto, Gustav lo notó y la abrazó-¿ya te tienes que ir?  

-perdona pero, te prometo que volveré a venir…es mas, te invitó a un boda-ella lo miro emocionada-es mas invitare también a tu hermano, se casa un amigo que creo tu conoces muy bien

-¿Quién?-preguntaba con su carita de bolita que tanto amaba

-Tom

-¡de verdad!

-si, y quiero que tu y tu hermano sean mis acompañantes, entonces…pequeña Lucy ¿quieres acompañarme a la boda?

-¡si!

-bueno…entonces nos vemos en una semana, yo le digo a tu hermano la hora a la que paso por ustedes, vale

-¡vale!

-bueno, en ese caso ya me retiro, que descanses pequeña Lucy

-adiós Gustav, sueñas con los angelitos-ella con su manita le dio la bendición a Gustav y le dio un beso en la mejilla que él le contesto

-ahora que ya se despidieron, cuando vuelva quiero verte cambiada y esperándome en tu cuarto para que te lea tu cuento

-esta bien-contesto sin ánimos y se fue a la casa

-bueno gordo, es hora de irnos-sin mas comencé a caminar, mi madre me esperada en la puerta de la salida del jardín, yo pase de largo pero Gustav se despidió y salió atrás de mi, subimos a mi carro y después arranque-bien… ¿por donde me voy?

-bueno tienes que irte por…-seguí sus indicaciones hasta poder llegar a la calle principal, después de eso ya sabía donde era su casa, así que ya no era necesario que me diera las indicaciones

-Leonardo…quería preguntarte algo…algo delicado

-claro…después del favor que me hiciste lo que quieras-le conteste, llegamos a un semáforo en rojo

-¿Por qué tu familia es así contigo?

-¿Qué…de…de que hablas?

-no finjas…en cuanto llegamos pude ver como todos te miraban y no solo eso, nadie…te dirige la palabra, ni siquiera cuando alguien llegaba y felicitaba a tu hermana, me saludaban a mi pero… ¿Por qué son tan fríos contigo?

-¿quieres saber por que sabía que había una puerta en la tienda de deportes?

-¿a que viene eso?

-mucho…verás…hace unos años, antes de que Lucy tuviera la capacidad de recordar algo, estaba la abuela, ella me llevaba al centro comercial a pasar las tardes ya que mi madre salía tarde del trabajo y mi padre estaba en un viaje de negocios y para que no me aburriera solo en la casa ella me llevaba ahí…aunque…con solo estar con ella ya era suficiente…yo la amaba

-¿la amabas?-preguntaba confundido, le di una mirada rápida ya que el semáforo cambio y comencé de nuevo a conducir

-un día como todos…ella me llevó al centro comercial, ella estaba enferma pero aun así me llevó ya que yo quería jugar el juego del escondite con la abuela, ja-sonreí ante el recuerdo de mi abuela-creo que nunca en la vida le insistí tanto como esa vez, me llevó y comenzamos a jugar, siempre lo hacíamos cuando íbamos, por eso se donde hay puertas en el centro comercial, siempre me escondía ahí pero…mi abuela siempre me encontraba

-debió de haber sido divertido

-lo era, pero,-la sonrisa de mi rostro se borró-ese día ella se tardo mas de lo necesario…ella no se tardaba mas de 10 minutos en encontrarme, era algo inevitable, ella me conocía mejor que nadie y se sabía el centro comercial como si ella misma lo hubiera hecho con sus manos…me preocupe y salí de mi escondite y la comencé a buscar mientras gritaba su nombre, después noté que toda la gente estaba corriendo en una dirección, los seguí y me metí entre la multitud que se había formado al llegar hasta enfrente…pude ver a mi abuela…tirada en el piso inconsciente…comencé a llorar y a zarandearla de su suéter pero, nada, después me llevaron al hospital con ella…llegaron todos, mis padres, mis tíos, mis primos, realmente esperaba un abrazo que me consolara pero…en lugar de eso recibí una bofetada por parte de mi padre y gritos de mi madre…todos me culparon del accidente de mi abuela, ella, cayó en coma…desde ese día, toda mi familia me señala, como el asesino de mi abuela…dejándome solo

-pero…no estas solo, lo dijo por tu hermana

-Lucy es la luz en esta oscuridad que me envuelve, yo creo que de no ser por ella…ya no estaría aquí

-pero estas aquí, tienes algo que hacer por alguien…además, no estas solo…por si no te has dado cuenta tu oscuridad se ah aclaro un poco mas

-¿a que te refieres?

-que nos tienes a Diana, Daniel, a Lucy, te apuesto a que los chicos también están contigo y yo también…ahora somos amigos

-muchas gracias gordo…de verdad…gracias-el me sonrió y llegamos a su casa, nos despedimos, el me pidió mi celular y después se fue con la promesa de marcarme y que si lo necesitaba podía ir a verle cuando quisiera, después de eso me fui a la casa, a la misma rutina de hace años…tenía 8 cuando paso todo eso y ahora 22,  14 años de desprecios, soledad, ignorancia y sobre todo…de oscuridad; entré a la casa y me fui al cuarto de Lucy, mis padres ni me miraron oh…al menos eso pensé

-quiero…que te alejes de tu hermana…no me arriesgare a que por tu culpa, a ella le pase algo-decía mi padre a mis espaldas, yo solo apreté los puños

-no lo haré…mientras ella siga queriendo que yo…le cuente historias y le demuestre mi amor, no lo haré, a sí que deja de molestar-pase de largo y toque la puerta del cuarto de mi hermana-¿se puede?-le preguntaba mientras abría la puerta ella estaba acostada con el libro en sus piernas

-¡Leonardo!-salió de la cama y me fue a abrazar, yo la cargue y le volví a poner en su cama-gracias por el regalo

-me alegra que te haya gustado, ¿Qué cuento quieres que te lea hoy?-le preguntaba mientras tomaba el libro

-quiero que me inventes uno hoy

-¿de verdad?

-si…la ultima vez me inventaste uno y me gusto, quiero otro-yo solo le sonreí tiernamente, a causa del recuerdo de mi abuela quería llorar y al ver a la única persona que me amaba de la familia sonreírme y pedirme cosas que solo yo podía darle, una lágrimas corrió por mi mejilla y la abracé-Leo…-ella me abrazó y se separo y me limpió las lágrimas que salían de mis ojos-no llores, yo te quiero mucho…ya verás que los demás también te van ah querer-decía con sus ojitos aguados, yo la volví a abrazar

-solo necesito que tu me quieras…tu eres lo mas importante para mi-seguimos abrazados, después de eso la arrope y comencé a contarle una historia…la historia de una princesa que encontraba el verdadero amor en un vampiro que podía hablar con las plantas…

Puede que mi vida sea la mas negra que alguien pueda imaginar pero…tiene razón Gustav…la oscuridad se ah aclarado…solo un poco.


lunes, 21 de noviembre de 2011

Cap. Especial 1° La pequeña aventura de Bill

Hola chicas, espero que estén bien n.n aquí les traigo un cap. nuevo, que es de los "especiales" que les había mencionado antes, este lo cuenta Bill espero que lo disfruten, besos!!! 


La pequeña aventura de Bill

Estaba aburrido en casa, mientras le cambiaba de canal a la tele, no encontraba nada bueno.

-no…no…no… ¿Qué es eso? Ah! Programa de medicina…no lo creo-seguía diciendo a lo canales que veía-cocina…política…publicidad…comerciales…ah!!!! ¡ya me harte!, y para colmo Tom no esta en casa, ni mamá, ni Gordon…demonios hasta Scotty no esta…tal vez le pueda marcar a Georg o a Gustav, para pasar el rato-saqué el celular y me fui al jardín para poder llamar tranquilamente.

*****Conexión telefónica Georg*****
-Bueno

-Hola Georg ¿Cómo estas?

-Bien Bill ¿Qué paso?

-pues solo quería preguntar si ¿querías ir a algún lado?, no se puede ser a donde tu quieras

-Bill perdona, pero…estoy con mi novia ahora y no podré salir contigo ¿Por qué no le marcas al gordo?, creo que no tenía nada que hacer hoy

-esta bien, gracias….no te gastes tanto, que quiero que estés completo para la boda de Tom y Diana

-vale…vale

*****Conexión telefónica Gustav*****
-¿Bueno?

-Hola Gustav ¿Qué haces?

-ah! Hola Bill, pues la verdad nada interesante, ayudo a un amigo con unas cosas ¿por?

-por nada es especial, quería ver si querías salir a algún lado pero…veo que estas ocupado

-perdona Bill, en cuanto acabe veo si puedo ir a tu casa

-gracias Gustav, pero no…termina de ayudarlo,

-de verdad lo siento

-no te preocupes nos vemos bye, bye

-bye

*****Fin conexiones telefónicas*****

-Y….estoy donde empecé… ¿Qué hago?

Sin mucha suerte, opte por disfrace para poder salir a la callé, pero antes… “tengo una idea”

*****Conexión telefónica*****

-¿Bueno?

-Hola Diana, perdona si interrumpo algo

-no…no te preocupes Bill ¿Qué pasa?

-quería preguntarte ¿Cómo es que me reconoces?

- Eh?! ¿Qué…como te reconozco?

-si…como tienes amigas que son fans de nosotros, creí que podrías ayudarme

-bueno….yo creo que…la ropa, el maquillaje, tus perforaciones, el peinado, tus uñas…

-¿no se te olvido nada? Talvez…. ¡mi cara!

-oye, me pediste ayuda

-si es verdad, lo siento…pero gracias Diana ¿estas con Tom?

-si

-bueno, hay me lo saludas bye

-bye

*****Fin conexión telefónica*****

-Bien ahora se lo que tengo que hacer-sin mas me fui al cuarto de Tom por algunas cosas y después al mío-no puedo creer lo que estoy apunto de hacer-sin mas comencé a despintarme todo…y cuando digo todo es ¡TODO!, me puse una camisa que le quedaba pequeña…según él, y un pantalón viejo mío, una sudadera, no la del logo de la banda, pero otra muy cómoda, unos tenis, me acomode el pelo diferente a otras veces, pero aun así me lo metí debajo de una gorra, después me puse frente al espejo de mi cuarto-bien creo que ya estoy…demonios ni yo mismo me reconozco…ummmm ahora me llamare… ¿Cómo me puedo llamar ahora?....¡ya se Carlos!, jajaja suena raro, en fin ahora soy Carlos, tomé una pequeña mochila, la llene de algunas cosas, tomé mi cartera y celular y me fui a la puerta y…-¿estos lentes?, se parecen a los de Gustav pero…-me los puse-no tienen aumento…¡perfecto! Con estos lentes ya nadie me puede reconocer-salí todo triunfante de la casa eh incluso pude ver a algunos fotógrafos y reporteros afuera de la casa, me vieron, yo les alcé la mano y me contestaron el gestó-muy bien es oficial-hablaba mientras caminaba-¡nadie me puede reconocer!...ahora ah pasar el día como cualquiera-llegue a la casa de Gustav y toqué el timbre

-si?...emmm disculpe ¿Quién es usted?-preguntaba Gustav algo confundido

-Hola Gustav

-esa voz….la conozco

-a que no me reconoces

-emmm ¿debería?

-soy Bill-le decía mientras me quitaba las gafas y la gorra

-¡¡Bill!!-gritaba con los ojos como platos

-hola

-pero…que…como… ¿te drogaste?-le di un golpe en la cabeza-¡auch!

-te lo merecías…oye vine a pedirte un favor

-¿Cuál?

-que me prestes tu carro

-¿mi carro?

-si, la prensa conocen el de Tom, Georg y el mío pero el tuyo…no, por que como apenas te regresaron tu licencia no habías conducido ni mostrado tu carro 

-esta bien…pero te recuerdo que esta en buenas condiciones y sin una mancha así que hay de ti que le hagas algo-entró en la casa y salió con unas llaves, abrió el garaje en donde tenía una linda camioneta, nada extrovertida ni lujosa, era negra, pero aun así no se veía pasada o vieja… ¡estaba en perfectas condiciones!-bueno aquí tienes las llaves, supongo que esto me gano por no haber estado libre

-si-me acerque a la camioneta para abrirla y subirme, arranque-¡wow! Que bien suena el motor

-si esta como nueva…la cuidas, es mi bebé

-calma-decía mientras fingía acariciarla-tu bebe esta a salvo con el tío Bill

-me preocuparía si fueras Tom pero…ya que, te diviertes, si acabo antes te alcanzo

-gracias Gustav-sin mas me fui alejando-ahora si… ¡vamos a divertirnos!- llegue hasta el centro comercial mas grande que conocía, este tenía de todo, uno no se podía no divertir aquí es decir ¡hasta tiene juegos! y me estacione-bien si aquí no hay nada que me quité el aburrimiento no habrá nada que lo haga-tome la mochila donde metería lo que me fuera a comprar para que nadie sospechara, comencé a caminar-ahora que lo pienso…mejor apago el celular, ¿para que quiero que me molesten?-apague el celular y pase por una tienda de animales-tal vez le pueda comprar algo a Scotty o a Diana…hay!, ahora que la menciono ¿Qué le puedo dar de regalo de bodas?-entré en la tienda y vi varias mascotas, cargue a mas de un cachorro que me movía la cola, me recordaba a Scotty cuando lo rescatamos del refugió-no creo que una mascota le sirva de mucho…es decir, supongo que estarán ocupados y luego con la gira, la luna de miel, los estudios de Diana, los conciertos…pobre perro no le prestarían nada de atención…¡Disculpe!-le decía a un empleado

-si ¿en que le puedo servir señor?

-¿tendrá premios para perro?, no los puedo encontrar

-claro señor….aquí están, ¿las va ah llevar?

-si-el joven me despacho y luego salí de la tienda, entre en varias tiendas, me compre varias cosas, mas de uno o una me miraban raro como diciendo “¿Por qué rayos compra esa ropa? O ¿esta comprando maquillaje?” o al menos eso esperaba, después de un rato me fui a la fuente de sodas y me compre una coca-cola y me senté en una banca, mientras me la tomaba-ah! Ya me cansé…y aun no tengo el regalo de Diana-miré a mi lado y vi a una chica, era guapa, esbelta, de pelo negro hasta la cintura, lacio, de piel blanca, llevaba un vestido color crema, muy bonito, con unas sandalias estilo romanas, pulseras color dorado y un pequeño broche en el cabello, estaba comiendo un helado al parecer-dis…disculpa-le hablaba algo apenado

-¿si?-me contestaba “al que linda voz tiene…tan fina”

-Hola emmm… ¿puedo hacerte una pregunta?

-claro-decía algo dudosa, “vamos Bill, adiós a las penas ahora eres Carlos y no te da pena hablar con chicas lindas”

-¿si te fueras a casar que regalo te gustaría que te dieran?-ella me miro espantada “¡perfecto… ¿no pudiste ser mas directo?!”-¡no…no me malinterpretes, es que mi hermano se va ah casar y le quería dar algo a su novia!

-ah!-decía aliviada-por un momento me espante…ummm ¿Qué me gustaría que me regalara mi nuevo hermano en mi boda?... ¿Cómo es ella?, tal vez me pueda guiar por alguna de esas cualidades

-bueno…-pensaba en como era Diana-pues ella es…a veces algo explosiva (nota: cuando amenazo Diana a su hermano con un cutter entre otras cosas), tierna, se ve pequeña, romántica, sensible, le cuesta un poco levantarse, siempre se preocupa por los demás…creo que en conclusión…es buena persona

-ummmm creo que tenemos algo-decía mientras le comía a su helado-que te parece… ¿si vamos a dar una vuelta haber que encontramos? La verdad estoy algo, bien perdida

-jajaja, ya somos dos pero… ¿no estas esperando a alguien?-“seguro a su novio”

-no…estaba aburrida en mi casa y me eh venido a pasar el rato aquí, creía que si me podía desaburrir podría ser aquí-“tira y… ¡encesta!, pensamos igual”

-esta bien vamos-me pare y le extendí la mano y ella me la tomó y me empezó a dar tirones para avanzar mas rápido-¿A dónde vamos?

-no lo sé…eso hace de esto mas divertido-decía mientras me dedicaba una gran sonrisa, termine caminado igual de rápido que ella, mientras que le apretaba la mano mas fuerte contra la mía, vimos de todo, ropa, accesorios, maquillaje; me la estaba pasando genial y lo mejor de todo…es que no estaba solo, hablábamos de todo lo que se nos ocurría, de nuestros gustos, lo que odiábamos, anécdotas de la infancia etc.…no podía creer que me podía abrir con ella, sin duda alguna…era especial.

-oye…-le decía mientras que ella se ponía un sombrero

-¿Qué pasa?

-¿Cómo te llamas?

-Emily-me decía mientras posaba con el sombrero-¿se me ve bien?

-si…eh!-me aclaraba la garganta-si, te ve bien-“Ok Bill ¿así o mas obvio?”

-jajaja… ¿y tu?

-¿yo que?-le preguntaba espantado

-tu nombre tonto

-ah! Mi nombre…mi nombre…-“Bill”-Carlos-“tarado”

-lindo nombre Carlos…bueno sigamos buscando sino tu cuñada no tendrá ningún regalo de boda-seguimos caminando, no pude evitar comprarme algunas cosas…claro que también Emily, aunque en ningún momento me dejó comprarle algo, es…orgullosa, ella me dijo y cito “tengo un pequeño trabajo y el dinero es fruto de mi esfuerzo, y tu dinero es lo mismo, no dejare que gastes en lo que trabajaste en alguien que apenas conoces”-¡Oye Carlos ven a ver esto!-me gritaba, esperen… “¿a que hora llego hasta allá? O.o” tuve que correr para llegar hasta donde estaba ella

-¿Qué pasa? ¿Encontraste algo?

-creo que si…aunque no se si esto es para el hermano de su futuro esposo-decía mientras señalaba una pequeña pulsera con una estrella de adorno con un grabado, esta estaba alado de una con forma de corazón con un mensaje grabado de igual manera que este pero era diferente el mensaje, ese decía "i love you" pero el otro, no entendía que decía-aunque…hay amigos que le regalan esto a una chica cuando no saben que mas darle

-es muy bonito

-¿sabes que dice?

-no…creo que esta en…español o… ¿latín? y…digamos que ninguno de esos idiomas es mi fuerte

-entremos…tal vez hasta podamos comprarnos algo nosotros-sin mas entramos

-bienvenidos ¿puedo ayudarlos en algo?-nos preguntaba una señorita

-si, me gustaría ver la pulsera del estante por favor-le pedía a la señorita, ella se acercó y nos enseño la pulsera-es muy bonita… ¿Qué dice la estrella?

-amigos por siempre…al dueño le dio por ponerlo en español y casi nadie le entiende

-si, eso nos paso a nosotros-le decía Emily- y… ¿Cuánto cuesta?

-como la pulsera es de oro blanco, y esta impreso el mensaje a mano, esto les viene saliendo en…$4,000.00 euros-Emily estaba tomando agua y se ahogo

-¡Emily ¿estas bien?!-le preguntaba espantado mientras le tomaba en pecho y la espalda para que pudiera respirara mejor

-¡¿Cuánto?!

-$4,000.00 euros

-me lo llev…

-Carlos espera-me interrumpía Emily

-¿Qué pasa?

-¿podemos hablar afuera?-yo solo asentí-ahora regresamos

-los espero-salimos de la tienda y…

-¡estas loco!

-¿Por qué? Es perfecta la pulsera…no es de novios ni nada parecido y es algo que pueda llevar y combinar con toda su ropa

-Carlos… ¿hablas enserio?, cuesta $4,000.00 euros, es…demasiado para una pulsera o para un regalo de bodas, apuesto a que eso vale la boda entera

-en realidad yo…

-¡¡¡¡ah no puede ser es Bill Kaulitz!!!!-gritaba una niña y segundos después, un mundo de gente se acercaba a mi, mi reacción fue tomar de la muñeca a Emily y emprender la huida, corrimos por todo el centro comercial, hasta deje los lentes tirados por estar corriendo como loco, también empuje a una chica de cabello negro con una gran coleta de lado que parecía sacada de una caricatura japonesa, su novio se enojo ya que me grito “¡imbecil!” él también tenía el cabello largo, yo solo pude gritar “¡lo siento!” mientras seguía corriendo pero Emily no podía correr mas y la tuve que cargar de caballito hasta que los perdimos en una tienda de ropa, nos escondimos entre la ropa

-creo…ah…que estaremos…a salvo…aquí-decía entrecortado a causa del cansancio, aun tenía la mano de Emily agarrada y ella la apartó, la voltee a ver y estaba seria y miraba al piso-¿Qué tienes?... ¡¿te paso algo?!-ella negó con la mirada-¿entonces que tienes?

-me…mentiste-decía mientras me miraba enojada y triste, inclusive parecía que iba a llorar, yo saque aire, me quite la gorra y me acomode le cabello

-mi nombre no es Carlos…es Bill Kaulitz

-te burlabas de mi verdad-decía enojada ya con lágrimas en los ojos

-no…Emily no es verdad

-si claro, apuesto a que todo lo que me dijiste fue mentira-una lágrima se deslizo por su mejilla  

-¡no es verdad!

-ah!, y ahora lo niegas, si me escuchabas dije… ¡odio a las personas que me mienten y que aparentan ser algo que no son!

-¡pero era yo en todo momento! ¡Nunca fingí nada!

-y tu ropa, el maquillaje, las perforaciones, tu peinado-yo solo pude bajar la mirada-Bill… ¿Y tu nombre?

-yo…yo solo

-sabes que mejor me voy

-Emily-trate de detenerla tomándola por la muñeca, pero ni siquiera me volteo a ver, solo se Safo de mi agarre y se fue caminando…aunque parecía mas bien que trotaba, me quede sentado un rato en la tienda, los empleados la había cerrado para que no pasara ningún accidente

-señor Kaulitz-me decía el gerente

-¿si?-decía mientras me quitaba las manos de la cara y le veía

-hay unos hombres afuera que lo buscan, me dieron esta identificación-la mire y supo de inmediato quienes eran

-son mis guardaespaldas, pueden pasar-no tenía ánimo de nada, en cuestión de segundos estaban a mi lado, yo me pare, tomé la mochila y… “es verdad, eh estado fingiendo ser alguien que no soy”-¿Dónde están los probadores?-me indicaron donde estaban, entré y me cambié de ropa, por la que me había comprado apenas, me peine, me puse maquillaje, y en la tienda en donde estaba compre unos lentes de sol y otro bolso y ahí guarde las demás cosas, volvía a ser yo, salí de la tienda con los guardaespaldas a mi lado, mientras que firmaba algunas cosas y me tomaba unas fotos con las fans, a pesar de todo no puedo defraudarlas, las quiero demasiado…alcé la mirada para caminar y vi a Emily que me miraba mientras que lloraba, quería ir a abrazarla pero no podía, seguro que ella me daba una cachetada si me le acercó, es mejor dejarla sola…por ahora.

Cuando ya íbamos de salida pasamos por la tienda donde estaba la pulsera, sin pensarlo entre y compré una de las dos. Regresé a la casa, sin antes dejarle su carro a Gustav; llegué a mi cuarto y me acosté en la cama, escuche como llegaba Tom…al parecer la había pasado de maravilla…era eso, o que entraba cantando era por que se había drogado, aunque… no podía decir lo mismo de mi, puse seguro al puerta, algo que…casi nunca hago, solo cuando enserio no quiero que me molesten, me quede acostado hasta que me quede dormido, soñando…soñando que pasaba unos  segundos… minutos… horas… días alado de Emily.